Cómo vivir sin pareja y ser plenamente feliz

Cómo vivir sin pareja y ser plenamente feliz, ahí la cuestión de una gran cantidad de personas. Existe una creencia generalizada que sostiene que para ser plenamente feliz es indispensable estar en pareja. Y es cierto que algunas investigaciones científicas así lo afirman, sin embargo, es interesante indagar en este tema porque estar en pareja no garantiza ser feliz y estar soltero no es sinónimo de infelicidad. Por ello, una investigación de 2015 encabezada por Yuthika Girme arroja luz sobre el hecho de poder ser plenamente feliz sin pareja.

Cómo vivir sin pareja

Un estudio de la Universidad de Aukland (Nueva Zelanda) liderado por Yuthika Girme (2015), nos revela el secreto para ser feliz sin tener pareja. Más allá de la idea romántica de compartir nuestra vida con alguien, diferentes autores en estudios anteriores comprobaron que la gente con pareja parecía más feliz que aquellos que estaban solteros. Sin embargo, la investigación de Girme indaga en esta cuestión y ahonda en las claves para ser igualmente feliz sin tener pareja.

El artículo, publicado en la revista Society for Personality and Social Psicology, ofrece las claves. Girme y su equipo, hallaron que la felicidad no depende en sí de estar con alguien, sino de la predisposición para afrontar de una manera positiva las relaciones sociales. El factor principal parece ser la evitación del conflicto con nuestro entorno. Por un lado, quienes tienden a evitar el conflicto a toda costa pueden resultar muy infelices, al igual que aquellos que buscan enfrentarlo. Sin embargo, una actitud inteligente ante el conflicto parece ser la clave, es decir, evitar conflictos innecesarios.

Pareja y soltería

De este modo, el equipo de Girme halló que aquellos sin pareja que mantenían buenas relaciones sociales con sus amigos y familias mostraban niveles de felicidad que aquellos que sí la tenían. Es más, el saber relacionarse positivamente y evitar conflictos innecesarios también influía de forma positiva en el matrimonio. De este modo, un soltero con relaciones sociales positivas puede ser más feliz que alguien con pareja que no evite los conflictos.

Tener un compañero o una compañera de vida puede ayudarnos a sentirnos acompañados y arropados en momentos difíciles, sin embargo, si el conflicto es parte de la relación, el nivel de satisfacción baja. Como indica Yuthika Girme, muchas parejas en las que predomina el conflicto puede suponer una fuente de estrés, por lo que vivir en soledad también ayuda en este tipo de casos a mantener un nivel de satisfacción elevado. Por ello, saber mantener relaciones sociales positivas -incluida nuestra pareja- ayuda a sentirnos bien.

La otra cara de la moneda: dependencia emocional

La investigación de Yuthika Girme puede resultar algo evidente, sin embargo, ayuda a desmontar ciertos mitos que predican que sin pareja es imposible alcanzar la felicidad. Del mismo modo, ayuda a trabajar la dependencia emocional, ya que muchas personas van de una relación a otra en busca del amor que les falta. O lo que es peor, mantienen una relación infeliz por no estar solas. Una obsesión por tener pareja puede demostrar un alto grado de dependencia emocional. Un tipo de dependencia que no nos dejará disfrutar de nosotros mismos.

Muchas personas expresan que no pueden estar del todo bien porque están solteras. Por ello, la investigación de Girme arroja luz a esta creencia, es decir, sí se puede ser feliz sin pareja y es un dato importante a tener en cuenta. Al final, se trata de saber mantener relaciones sociales saludables con nuestro entorno, ya que de trasfondo puede esconderse una sensación de soledad que busca ser rehuida en compañía de alguien.

Aun así, existe otro trasfondo importante en la búsqueda incesante de pareja, y es la incapacidad de saber estar con nosotros mismos. En una gran cantidad de ocasiones, el no tener una sana autoestima y ser incapaz de ser felices por nosotros mismos, nos arroja a la búsqueda de alguien que nos ofrezca esa supuesta felicidad desde el exterior. Algo realmente peligroso, ya que responsabilizaremos a esa persona de nuestra felicidad. Si nos va bien, perfecto, pero si la otra persona no cumple las expectativas que hemos depositado en ella, la podemos llegar a culpar de nuestra infelicidad.

Conclusión

A fin de cuentas, la felicidad no depende de estar en pareja o estar solteros, sino de la relación que establezcamos con nosotros mismos. ¿Sabemos ser felices? ¿Sabemos estar solos? Son dos cuestiones importantes que debemos plantearnos, ya que si la respuesta es «no», quizá lo que estemos haciendo es buscando la felicidad en el exterior, por lo que podemos caer en la dependencia. Existe una frase viral bastante acertada cuya esencia dice algo así: «me gusta estar contigo, pero puedo estar sin ti».