Meghan Markle, la duquesa de Sussex, se ha embarcado en un viaje de descubrimiento y conexión durante su reciente visita a Nigeria. Pero su elección de vestuario desató un acalorado debate en Internet.

En un emotivo discurso pronunciado en la cumbre Women in Leadership, agradeció la calurosa acogida que recibieron ella y el príncipe Harry, refiriéndose a Nigeria como “mi país”. Este sentimiento de pertenencia se vio subrayado por la reciente revelación de Meghan de que es nigeriana en un 43 %, un descubrimiento que ha profundizado su comprensión de su propia herencia e identidad.

Ataviada con un vibrante vestido rojo, Meghan cautivó al público con sus palabras, expresando su honor e inspiración por encontrarse entre mujeres nigerianas. Reflexionando sobre su origen afroamericano, destacó la importancia de conocer las propias raíces y el profundo impacto que puede tener en el sentido de uno mismo.

Su mensaje de empoderamiento y representación caló hondo entre los asistentes, ya que instó a las mujeres de éxito a volver a sus raíces y servir de modelo a las generaciones futuras. Meghan hizo hincapié en la necesidad de que las jóvenes se vean reflejadas en puestos de poder e influencia, y abogó por un cambio en las normas sociales que a menudo marginan a las mujeres de color.

Más allá de sus palabras, los actos de Meghan fueron elocuentes al acercarse a la cultura nigeriana y abrazar la calidez de sus gentes. Desde asistir a un almuerzo con el ministro de Defensa nigeriano hasta participar en un partido de exhibición de voleibol sentado, se sumergió en el rico tapiz de la vida nigeriana.

En el almuerzo, Meghan derrochó elegancia con un vestido blanco entero de St Agni sin hombros. Su entrada en el comedor de oficiales provocó exclamaciones de admiración, con su radiante presencia iluminando la sala. Junto a ella, el príncipe Harry, con un traje de lino color crema, cautivó a los invitados.

Pero hubo otra acción que también acaparó los titulares: sus elecciones de moda. La gente comentó que el vestido era una mala idea, diciendo: “Llevar un vestido largo blanco sin tirantes para un almuerzo, que además era bastante transparente en la parte inferior, habría sido más adecuado para un evento de noche”. Estando de acuerdo otros comentaristas, “¡Demasiada piel! No es un evento de noche”.

El camino de Meghan sirve como un poderoso recordatorio de la belleza de la diversidad y de la fuerza que proviene de abrazar nuestra humanidad compartida. Independientemente del atuendo que elija, mientras sigue inspirando y elevando el espíritu, recordamos el profundo impacto que una sola persona puede tener en la creación de un mundo más inclusivo y empático.